Almacenamiento en la nube
¿Qué es el almacenamiento en la nube?
El almacenamiento en la nube es un espacio virtual donde se guardan datos importantes, archivos y otra información dentro de un servidor físico seguro, en general gestionado por un proveedor externo o un administrador local.
Centros de datos externos fiables
El almacenamiento en la nube imita la funcionalidad de los dispositivos de almacenamiento locales, y te permiten guardar o acceder a una variedad de tipos de contenido en cualquier momento, desde un entorno virtualizado. Toda la información actualizada en la nube se guarda de forma remota en fiables centros de datos externos. Cuando los usuarios guardan datos en servidores de nube, esa información pasa a ser responsabilidad del proveedor externo a cambio de una tarifa.
Soluciones de almacenamiento externas
Entre los ejemplos de soluciones de almacenamiento en la nube externas se incluyen Google, Dropbox y Microsoft OneDrive (para personas o pequeñas empresas) o Microsoft Azure (para empresas más grandes). Y como otras formas de computación en la nube, existen múltiples infraestructuras entre las que elegir, incluidos los modelos público, privado e híbrido.
Almacenamiento ilimitado
Antes del almacenamiento en la nube de uso general, los usuarios y organizaciones en general creaban y gestionaban sus propias SAN para guardar su trabajo y otros datos. Cuando se llegaba al máximo de ese espacio de almacenamiento, los otros datos adicionales se guardaban o transferían a dispositivos de almacenamiento externos. Al aumentar la demanda de almacenamiento, agregar más servidores o más infraestructura se volvió algo necesario.
¿Cómo funciona el almacenamiento en la nube?
El almacenamiento en la nube es un espacio virtual (es decir, servidor de nube) creado dentro de uno o más servidores físicos. El servidor de nube en sí está compuesto por un hipervisor o software similar, y gestionado por este. Los usuarios pueden acceder al almacenamiento en la nube a través de una conexión a Internet, portal web, Intranet, aplicaciones de almacenamiento en la nube u otras interfaces de programa de la aplicación (API). Cuando un usuario carga datos o archivos en almacenamiento en la nube, en general se copian a múltiples servidores para preservar la redundancia, ayudar a evitar la pérdida completa de datos en caso de falla de componentes, y velar por la continuidad del negocio.
Cómo hacen los usuarios para cargar y descargar esos datos, y cuánta capacidad de almacenamiento se asigna, depende de proveedores externos y los términos de suscripción o acuerdos posteriores. Fundamentalmente, una vez que el usuario paga un cargo mensual o por transacción, el proveedor externo se hace responsable de gestionar y actualizar esa infraestructura de la nube. Los usuarios pueden aprovisionar almacenamiento en la nube a sus propios dispositivos, mediante una interfaz web o dinámicamente, según sea necesario.
Todo dato almacenado en la nube solo es accesible para los usuarios autorizados y está protegido por cualquier cantidad de funciones de seguridad, incluidas contraseñas, cifrado y otros métodos de verificación de credenciales.
En general, existen tres tipos de almacenamiento en la nube: pública, privada e híbrida. El almacenamiento en la nube pública a menudo se ofrece como parte del modelo como servicio, con empresas que eligen una solución de nube de hiperescala y con empresas más pequeñas que eligen una solución basada en suscripción.
El almacenamiento en la nube privada es similar al almacenamiento en la nube pública, en todo, excepto que la responsabilidad de la gestión de la nube recae en la organización del usuario final, no en un proveedor externo. El almacenamiento en la nube privada es una elección popular para empresas y organizaciones que siguen requisitos de seguridad estrictos o trabajan con volúmenes grandes de datos confidenciales.
Y, como su nombre indica, la infraestructura de la nube híbrida combina elementos de la nube pública y privada. Este método es ideal para organizaciones que necesitan realizar cargas de trabajo específicas o que manejan un rango más amplio de datos que requiere diversos niveles de seguridad.
Puntos a favor y en contra del almacenamiento en la nube
Ventajas
Las ventajas del almacenamiento en la nube superan ampliamente a sus desventajas. Por empezar, el almacenamiento en la nube es sencillo y cómodo de usar en cualquier lugar donde haya conexión a Internet, en general implementando una interfaz intuitiva de arrastrar y soltar. Pero más allá de los meros problemas de experiencia del usuario, el almacenamiento en la nube hace simplifica el intercambio de archivos de todo tamaño, permitiendo la edición casi en tiempo real y la colaboración entre usuarios dentro y fuera de una empresa u organización.
Comparado con las antiguas formas de almacenamiento de datos, el almacenamiento en la nube subcontratado es mucho menos caro, elimina muchos problemas de gestión que generan grandes gastos y largos procesos. En otras palabras, el almacenamiento en la nube externo permite a empresas y organizaciones centrarse más en sus objetivos comerciales que en las demandas de mantenimiento. El almacenamiento en la nube también se ofrece como servicio, los usuarios solo pagan el almacenamiento que usan.
La seguridad también mejora con el almacenamiento en la nube. Muchos proveedores de almacenamiento en la nube incluyen múltiples protecciones integradas para los datos, desde contraseña y cifrado hasta copia de seguridad automatizada en los servidores del proveedor. Además, el almacenamiento en la nube reduce la necesidad de dispositivos de almacenamiento externo, que puede ser un potencial riesgo de seguridad en caso de robo o pérdida.
Desventajas
Tal vez la desventaja más importante del almacenamiento en la nube es también su mejor punto a favor: requiere de conexión a Internet. Sin eso, los usuarios no pueden acceder a sus datos a menos que tengan copia de seguridad local. Este problema potencial en general fuerza a que los usuarios y las empresas se aseguren de disponer de un ancho de banda sólido y fiable para sus necesidades y evitar una excesiva latencia.
En segundo lugar, mientras que el almacenamiento en la nube externo alivia parte de los problemas de gestión cotidianos, disminuye el control administrativo general de un usuario u organización. Todo contratiempo o fallo de componente requiere que se trabaje en coordinación con el proveedor pertinente para resolver el problema. Esta falta de control es un motivo clave por el cual muchos clientes de almacenamiento en la nube optan por las infraestructuras híbridas, que ofrecen control adicional in situ.
Por último, sectores como el sanitario y el financiero requieren normas y directrices de privacidad de los datos específicas, que pueden limitar las opciones de almacenamiento en la nube para algunas organizaciones.
Aplicaciones modernas del almacenamiento en la nube
Gracias a la tecnología de la nube, el almacenamiento de datos se vuelve rápidamente más ágil, escalable y rentable. Y para las empresas de todo el mundo, se usa el almacenamiento en la nube casi todos los días, lo que las ayuda a mejorar y optimizar la infraestructura de TI, acelerar el crecimiento, y tomar decisiones en una gran cantidad de verticales. En otras palabras, comparado con los servicios de hardware o tradicionales, el almacenamiento en la nube permite a las empresas descentralizar los datos que crean, recopilan y guardan, y hacen más fácil el acceso, compartir y proteger datos desde cualquier lugar del mundo, mientras tengas conexión a Internet.
No es necesario que busques mucho para encontrar el almacenamiento en la nube en el mercado. Los tipos de almacenamiento en la nube más comunes y accesibles son públicos, con aplicaciones como Google Docs, que se sitúa a la cabeza de la lista. Aquí, los usuarios pueden componer documentos y otros contenidos, guardarlos, revisarlos, compartirlos e incluso trabajar codo con codo con otras personas en un entorno virtualizado. La reducción de los obstáculos físicos propicia nuevos niveles de colaboración que no serían posibles con los servidores de hardware.
Pero el almacenamiento en la nube también se volvió la mejor solución para cargas de trabajo fundamentales para el negocio, para tareas de suma importancia y generales, como también para proteger las cantidades masivas de datos que recopilan las empresas.
En cargas de trabajo para tareas de suma importancia, el almacenamiento en la nube puede mejorar el rendimiento de las aplicaciones que necesiten latencia ultrabaja, disponibilidad extrema, y escalabilidad en el momento. Para cargas de trabajo fundamentales para el negocio, las aplicaciones web que tienen acuerdos de nivel de servicio (SLA) pueden tener funciones de trabajo de rendimiento, disponibilidad y resiliencia necesarias para las operaciones cotidianas y más. Y para necesidades de uso general, el almacenamiento está siempre disponible.
El almacenamiento en la nube también es ingrediente activo en la gestión de datos y protección de datos, y suma una capa adicional de seguridad al servir como copia de seguridad fiable en caso de desastre imprevisto.
HPE y servicios de almacenamiento en la nube
HPE ofrece un amplio espectro de servicios de almacenamiento en la nube disponibles a través de uno de varios modelos de pago por consumo basados en el consumo. Con la ayuda de servicios y productos como HPE 3PAR StoreServ, HPE GreenLake, HPE InfoSight, Scality RING, y muchos más, HPE ayudó a las empresas a acelerar y optimizar sus cargas de trabajo virtuales según sus necesidades únicas, a mitigar riesgos comunes e imprevistos, y a reducir costos al mismo tiempo.
En la venta minorista, HPE ayudó a Yoox Net-A-Porter Group (YNAP) en la transición de servidores de almacenamiento heredados a una solución más fiable de HPE GreenLake con capacidad flexible. Con esto, YNAP pudo mantener un rendimiento de almacenamiento estable incluso en interrupciones imprevisibles en las transacciones de comercio electrónico. No solo HPE ayudó a YNAP a satisfacer esas demandas, también duplicaron la productividad en el desarrollo de productos y simplificaron la gestión de presupuesto.
Para Toyota Mapmaster, que crea bases de datos de mapas avanzados para los sistemas de navegación de Toyota, HPE ayudó a integrar dos sistemas de almacenamiento de alto rendimiento totalmente nuevos. A su vez, Toyota Mapmaster redujo drásticamente los tiempos de procesamiento de lotes grandes y aceleró los procesos de inspección y validación.
Una y otra vez, trabajar con HPE en soluciones de almacenamiento en la nube arroja resultados sólidos, desde grandes ahorros de CAPEX y menos desperdicio de recursos, hasta una amplia optimización de datos y almacenamiento que genera nuevas oportunidades e impulsa la innovación.